a matrix dreamphoto © 2006 Gisela Giardino | more info (via: Wylio)

El otro día leía en twitter que un alto número de adolescentes estaban más contentos con su vida digital que con su vida analógica. (No recuerdo de quien era el tweet ni dónde estaba la noticia que comentaba, pero si alguien se siente aludido estaré encantada de darle mention). Sé que muchos se escandalizaron, pero yo los entiendo. Yo no soy adolescente, pero yo también soy mucho más feliz en mi vida digital que en mi vida analógica.

Porque mi vida analógica es una mierda. Con todas las letras. Mi vida se limita a trabajar, estudiar y ver series en una pantalla de 7 pulgadas; cenar viendo Intereconomía aunque se te reviente el hígado y estar sola. Porque dos meses para intentar quedar con alguien o que tus amigos estén en cualquier lado menos en tu ciudad hace que tu vida sea una mierda. Que tu opinión no valga nada, que da igual lo que hagas siempre esté mal, siempre recibas un no…. ¿bueno, pilláis el concepto?

Pero en mi vida digital, a veces me permito soñar, y a veces doy mi opinión (cuando se me olvida autocensurarme), y leo cosas interesantes y ¡¡joroba!! Tengo hasta un gato (virtual, pero gato). Y puedo hablar y me siento menos sola…

Lo único bueno que tiene mi vida analógica últimamente es que me he autolevantado mi restricción de café… Total, voy a dormir igual… y el estomago ya lo puedo regalar por mal funcionamiento… Creo que este lo prefiero en 1.0

Comments (0)

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...